Los refranes de Dios hablan de la presencia de Dios como ayuda moral y espiritual, también de las costumbres populares sobre la creencias religiosas.
A Dios Rogando y con el mazo dando.
A ira de Dios no hay cosa fuerte.
A quien Dios no le dio hijos, el diablo le dio sobrinos.
A quien Dios quiere bien, la perra le pare lechones.
A quien Dios quiere, la casa le sabe.
A quien Dios se la diere, San pedro se la bendiga.
A quien madruga Dios le ayuda.
Al erizo, Dios le hizo.
Boda y mortaja, del cielo baja.
Cada uno en su casa, y Dios en la de todos.
Compañía de dos, compañía de Dios.
Cuando Dios no quiere, los santos no pueden.
Cuando Dios quiere, con todos los aires llueve.
Cuerpo harto, a Dios alaba.
De hora en hora, Dios mejora.
Dios aprieta pero no ahoga.
Dios castiga sin palo ni piedra
Dios los cría y ellos se juntan.
Dios no se queja, mas lo suyo no lo deja.
Dios que da la llaga, da la medicina.
Dios sea loado, el pan comido y el corral cagado.
El hombre pone y Dios dispone.
El que no va por la mar, no sabe a Dios rogar.
Fraile que pide por Dios, pide para dos.
Más vale a quien Dios ayuda, que quien mucho madruga.
Quien se muda, Dios le ayuda.