No olvides que al abarcar el tema con tu hijo, el enemigo es la droga, no tu adolescente. Ahora, más que nunca, necesita tu apoyo. Busca ayuda profesional para que tú también cuentes con una ayuda durante el proceso. Y sobre todo procura mantener una comunicación directa y sincera con tu adolescente, una vez que él o ella haya reconocido que tiene un problema con las drogas.
Tabaco
Olor a humo en la ropa, el pelo y el aliento; dientes amarillos, tos, dificultad para respirar, peor rendimiento deportivo.
Estimulantes
Excitabilidad, insomnio, sudores, sequedad de boca y labios, mal aliento, pérdida de peso, pupilas dilatadas, paranoia, alucinaciones, temblores.Marihuana
Cambios de humor, reflejos más lentos, euforia, aumento de apetito, incremento en el pulso, cansancio general, ojos rojos.
Inhalantes
Dificultad para hablar de forma coherente, nauseas, vómitos, respiración más lenta.Cocaína
Excitabilidad, euforia, tendencia a hablar mucho y rápido, ansiedad, pupilas dilatadas, agitación general, paranoia.Pastillas Tranquilizantes o anti-depresivas
Somnolencia, cansancio, confusión, pulso lento, respiración ligera, incoherencia al hablar, temblores, pupilas dilatadas.
Alcohol
Incoherencia al hablar, vómitos o náuseas, mala coordinación, somnolencia, depresión, altibajos, olor a alochol en el aliento.