Una de las comarcas más bellas de la provincia de Alicante es la comarca de la Vall de la Gallinera.
A principios de Abril, con los cerezos en flor, el valle se hace más profundo y la luz llega a las artesanales terrazas ganadas a la montaña con duras faenas agrícolas de nuestros antepasados. Allí la primavera nos proporciona un paisaje con una fuerza difícil de superar.
Pero lo mejor de la montaña de Alacant son sus gentes. Pequeños pueblos muy orgullosos de sus tradiciones y de su identidad; tierras donde concurren Valencia y Alacant y euroresidentes de decenas de nacionalidades que han elegido este paraíso para vivir. Hay buenas razones para ello. Benialí, por ejemplo, es un pueblo, extremadamente pequeño y encantador, apenas unos cientos de habitantes, con silencio de montaña y mucha paz. Y la ventaja del turismo rural es que nos permite de vez en cuando un reencuentro con la gastronomía más tradicional y auténtica.
El restaurante Sabors es ya mucho más que un bar de pueblo, atrás queda la experiencia de L´Aplec, aquel entrañable bar-restaurante situado en la misma carretera que cruza el pueblo.
Hoy L'Aplec todavía está abierto con ese mismo nombre. Pero el equipo que le hizo famoso en su día, liderado por Tony y Germán, su arte culinario, sus platos sensacionales, y su entrañable forma de acoger a sus clientes (a quienes son tratados como amigos desde el momento en que entran por la puerta), están enfrente, en Sabors. Su nuevo restaurante es un local muy agradable y elegante con una decoración limpia y acogedora. Las instalaciones de la cocina son modernas y además les han permitido abrir una terraza para las cenas durante el buen tiempo, situada en el piso de arriba, una auténtica maravilla.
Tony y Germán, se lo merecían, ellos han sido protagonistas de muchas historias en estas tierras de la Marina Alta, su labor ha sido fundamental a la hora de impulsar el desarrollo turístico de la zona. Hoy, en su restaurante Sabors, a la tradición se le suma innovación y un entusiasmo que sus propietarios vierten a raudales. Lo mejor es ponerse en sus manos. Dejar que Tony y Germán le pongan en la mesa lo que ellos quieran, habrá sorpresas y todo lo que echen de menos si han estado con anterioridad.
Tony y Germán disfrutan con sus clientes. Los tratan como de la familia. En su restaurante es posible degustar algunas cosas muy especiales, difíciles de olvidar. Aunque el menú es muy amplio y variado, capaz de saciar largas caminatas previas entre las montañas, nos quedamos con unos pocos platos excelentes: las morcillas de arroz, las virutas de pollo fritas y, atención, una paletilla de cordero al horno absolutamente insuperable. Sólo por este plato, merece la pena desplazarse hasta allí. Los postres variados y caseros (entre ellos un exquisito pastel de calabaza, lo buñuelos), con un moscatel de la zona extraordinario.
Pero Tony es capaz de todo y con la filosofía de la "cuina de mercat" y cocina creativa lo mismo hace un rabo de toro, que un el corder amb xocolata (debe ser cosa la identitat de los Països Catalans), costelles amb mel y el confit d´anec. Sin duda, juega con ventaja. Quizás es de las pocas zonas de Alicante donde todavía sea posible encontrar en una cocina de mercado con productos auténticos, como es el caso de un cordero alimentado con hierbas de la montaña... Por mucho que Ferrán Adriá experimente en su laboratorio, nunca superará estas cosas.
Nuestro consejo es que sigan fieles a sus raíces y a los buenos productos de la zona y además que nos dejen disfrutar de creaciones tan imaginativas como la ensalada de flores de cerezo (en temporada), las croquetas calientes de foie con mermelada de naranja amarga, y las albondiguitas caseras y la olleta que les transportarán al ataño, cuando los guisos y platos saboreaban al buenhacer, mimo y a la dedicación de nuestras abuelas.
Decíamos en nuestra primera reseña que lo mejor de este restaurante es que no aparecía en ninguna guía. Y también los precios... en proporción inversa a la cantidad que te sirven. Es difícil ocultar por más tiempo esta magnífica labor y Sabors empieza a aparecer asiduamente en muchas reseñas. Por esta razón aconsejamos reservar mesa con antelación (Teléfono: 966 406 646 y 649 639 813), especialmente los fines de semana. El lleno es completo.
Restaurante Sabors
(antes L'Aplec) de Benialí (Alacant)
C/
Carretera, Benialí, Vall de la Gallinera,
Teléfono:
966 406 646 y 649 639 813.
Con un nuevo local situado enfrente del antiguo Aplec y un nombre nuevo "SABORS".
Exp.
de Jonh Edward Nash La Vall de la Gallinera |