El producto consiste en un pequeño cono de cerámica micro porosa que se ajusta a cualquier botella de plástico que exista en el mercado y que regula la cantidad de agua que el usuario desee dar a su planta. Los modelos que tiene a la venta permiten suministrar a la planta una cantidad de 30, 20 y 7 cl de agua por día y su precio de venta en el mercado para los tres productos oscila entre los 7 y 10 euros.
Ventajas: Permite ausentarse durante largos periodos de tiempo sin necesidad de regar las plantas, dejando que el sistema de microgoteo vacíe la botella en cuestión.
Inconvenientes: Con este sistema es el ser humano, y no la planta, el que decide cuanta agua debe consumir con el consiguiente riesgo de encharcamiento o de "achicharrar" las plantas si se dan temperaturas elevadas durante una ausencia prolongada.