Abonos o fertilizantes en función del tipo de planta y la estación del año
Hay una tendencia generalizada entre las personas, por lo general se tiende a creer que lo que las plantas "comen" es la tierra donde profundizan sus raíces, pero nada mas lejos de la realidad.
Hubo un científico holandés que a principios del siglo XX hizo un experimento para demostrar este aspecto; plantó un pequeño sauce en una gran maceta donde previamente había pesado la tierra que había puesto. Diez años después, el sauce había crecido de forma espectacular y había multiplicado su peso por más de cien; cuando pesó la tierra, esta... ¡pesaba lo mismo que diez años atrás!
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¿De qué se nutren las plantas?
Las plantas se nutren de los elementos minerales que tiene la tierra, los básicos son: Nitrógeno(N), Fósforo (P), Potasio (K) y Calcio (Ca). Estos normalmente no están aislados sino que se encuentran en forma de sales (por ejemplo Nitrato Potásico o Fosfato Monoamónico), pero no son los únicos que necesitan las plantas para su nutrición; hay otros elementos mas pequeños, pero no por ello menos importantes, también imprescindibles para la vida de las plantas: el Hierro (Fe), Azufre (S), Magnesio (Mg)... y los micro-elementos Boro (B), Zinc (Zn) o Manganeso (Mn) entre otros.
Los substratos comerciales que usamos para nuestras plantas normalmente suelen llevar alguna formulación "universal" (es decir , equilibrada en todos sus componentes, y válida para todo tipo de plantas). Pero este contenido en abono, que es sólido, es absorbido por la planta en los primeros meses, a medida que regamos y el abono se va disolviendo.
Abonos o fertilizantes en función de su composición, el tipo de planta y la estación del año
Se recomienda la adición posterior de abonos o fertilizantes en función del tipo de planta que tengamos y la estación del año en que estemos. La primavera es una época perfecta para nutrir nuestras plantas y ayudar a que se repongan del frío.
Los abonos pueden añadirse al sustrato de dos formas: en sólido o líquido disuelto en el agua. La única diferencia suele ser la rapidez de absorción, en el caso de los líquidos se absorben con mas rapidez que los sólidos.
Es importante tener en cuenta que sea cual sea el tipo de abono para plantas, es recomendable usarlos de forma puntual y siguiendo siempre las instrucciones de cada producto.
Tipos de abonos para plantas
Fertilizante y abono se encargan de devolver a la tierra los nutrientes que necesita el suelo para propiciar el crecimiento adecuado de plantas y árboles. El abono se aplica directamente sobre el terreno, mientras que los fertilizantes necesitan el agua para disolverse en el suelo y poder enriquecer el suelo pero ambos realizan la misma función.
Los tipos de abonos para plantas se clasifican según su composición y pueden ser abonos orgánicos o abonos minerales.
Abonos orgánicos
Los abonos orgánicos están hechos de materiales naturales y orgánicos, estiércol, compost y otros productos animales y vegetales. Los abonos orgánicos funcionan más lentamente y a largo plazo y nutren también el suelo en el que usa con el tiempo.
Abonos inorgánicos
Los abonos inorgánicos están compuestos de componentes químicos que contienen los nutrientes necesarios para las plantas. Sus beneficios se notan más a corto plazo.
Fertilizantes con Nitrógeno
El nitrógeno es un nutriente que ayuda al crecimiento de la planta. Se suele usar cuando la planta necesita un estímulo para continuar creciendo. Los fertilizantes orgánicos e inorgánicos tienen fuentes de nitrógeno
Fertilizantes con fosfato
El fósforo es un nutriente que las plantas necesitan continuamente. El fósforo ayuda a fortalecer el sistema de raíces y los tallos de la planta.
Fertilizantes de potasio
El potasio ayudará a que las raices de plantas crezcan más profundas y fuertes, es un nutriente vital para la fotosíntesis y tiene la capacidad de ralentizar cualquier enfermedad que pueda infectar el jardín. El fertilizante de potasio tiene muchos beneficios. Cuando use este fertilizante, colócalo lo más cerca posible de las raíces.
Cuando las plantas tienen deficiencia de potasio los bordes de las hojas suelen adquirir una tonalidad amarillenta o dorada en los bordes.
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