Cómo elegir un crucero

Hay más de 160 embarcaciones en los folletos de las 24 principales líneas de cruceros y más de 7.500 itinerarios, desde Alaska hasta Zanzíbar. A continuación, se indican 10 pasos a seguir para evaluar las distintas opciones y elegir la travesía que más se ajuste a sus gustos y sus expectativas:

1. A dónde ir en el crucero: Elegir primero el destino y, a continuación, la embarcación. Alaska y el Caribe son dos destinos clásicos, pero las líneas de cruceros están añadiendo nuevos itinerarios a lugares sorprendentes como Asia, el océano Índico o Sudamérica.

2. Cuándo ir de crucero: conviene evitar las fechas de temporada alta; hay más ofertas y un templado día de otoño puede ser mucho más agradable que torrarse bajo el sol del Mediterráneo en pleno agosto. En destinos populares entre las familias, como Alaska, se consiguen mejores ofertas en fechas en las que los niños tienen clase.

3. Con qué compañía reservar: elige la compañía de cruceros y los compañeros de viaje que más se adecuen a tu personalidad. Hay líneas más informales que otras. Algunas compañías tienen códigos de vestimenta y tiempos establecidos para las comidas; otras están más adecuadas a las necesidades de los niños, etc. Pide información en tu agencia de viajes y consulta en Cruisecritic.com las opiniones de los usuarios.

4. El coste total del crucero: No basta con consultar el precio diario de un camarote y multiplicarlo por el número de noches que dure la travesía. Consulta cuestiones como el precio del pasaje desde y hasta el puerto de origen, otros costes adicionales como el alcohol (a menos que el viaje sea con todo incluido) y los precios de las excursiones en tierra.

5. Planearlo con tiempo: nunca es demasiado pronto para empezar a planear el crucero. Muchas compañías ofrecen descuentos en reservas realizadas con bastante antelación y a medida que van aumentando las reservas los precios suben.

6. El barco: el tamaño importa, porque puede dictar el itinerario. Las embarcaciones de menor tamaño (de hasta 138 pasajeros) pueden atracar en puertos más pequeños y ofrecer una experiencia más personalizada. También suelen ser mejores para travesías orientadas a la naturaleza, como la Antártida o las Galápagos. Desventajas: opciones de ocio y comidas más limitadas.

7. Tipo de camarote: tener en cuenta el itinerario a la hora de elegir o no un camarote con balcón. En cruceros por el Atlántico, donde solo se ve mar, no es importante, pero en otros por zonas como Alaska o el Mediterráneo, las vistas lo son todo.

8. Planificar los vuelos al lugar de partida/llegada con cierto margen: los retrasos en los vuelos son cada vez más frecuentes y salvo que se reserve el vuelo a través de la compañía del crucero, el barco no esperará, por lo que conviene llegar al menos un día antes al lugar de partida del crucero. Por otra parte, las extensiones de los cruceros alcanzan cada día más popularidad; conviene tener unos días de margen por si al final se desea ampliarlo un poco.

9. Antes de embarcar: planea las actividades que deseas realizar a bordo, hay infinidad de excursiones y actividades, pero las más interesantes son las primeras en quedarse sin plazas. En ocasiones se pueden realizar las reservas con antelación e incluso disfrutar de ofertas por reservar en puerto.

10. Consultar un experto: el consejo profesional es, a menudo, indispensable. Para consultar las mejores agencias especializadas en cruceros visite la siguiente dirección: travelandleisure.com/alist. Para un listado más amplio consulte: cruising.org.

Fuente: Travel and Leisure