No engordar en Navidad
La Navidad es una época de alegría, celebraciones familiares ..... y comilonas, cava y copas. Sin embargo, aunque estas fechas suponen una importante tentación para una persona a dieta, podemos intentar seguir unas estrategias básicas en los momentos de mayor tentación para evitar cuando llegue Enero tener que volver a empezar desde cero de nuevo.
Estrategicas para las fiestas de Navidad: Asegurarnos de tomar un aperitivo rápido antes de que empiece la fiesta, para no estar hambrientos - una fruta y una loncha de pechuga de pavo es un ejemplo de una opción sana. Decidir con antelación cuántas galletas o patatas vamos a tomar y ser muy extricto. Compensar el exceso de calorías a lo largo del resto del día; una crema de verduras o una ensalada en la otra comida o cena. Si es una fiesta en la que todos se llevan algo, preparar alimentos saludables compatibles con el tipo de dieta que estamos siguiendo. Tener especial cuidado con las calorías adicionales ocultas en las bebidas alcohólicas. Tomar vino blanco en lugar de tinto y mezclarlo con agua con gas para que dure más. O mezclar un vaso de vino espumoso con zumo de naranja.
Comidas o cenas de Navidad de empresa: Alrededor de esta época del año, la tradicional comida de Navidad con los compañeros de trabajo es otra posible amenaza para la dieta. Sea lo que sea el tipo de restaurante elegido, debemos intentar evitar las opciones de carta con salsas o fritos. Si es un menú concertado, siempre podemos pedir medias raciones. De nuevo es importante no pasarse con el vino, elegir un té verde desintoxicante en vez de café y, en lugar de una bebida alcohólica para la sobremesa pedir agua con gas.
Hacer ejercicio: En muchos lugares del mundo, el invierno ofrece unas oportunidades de ejercicio únicas que no se pueden practicar el resto del año. Desde el patinaje sobre hielo al esquí, hay oportunidades para quemar calorías. Además, se queman mas calorías cuando hace frio, así que el tiempo se convierte en nuestro aliado. Si no nieva donde vivimos, podemos simplemente salir a caminar a paso rápido durante al menos media hora después de cada comida. Es un buen modo de asociar los excesos de la Navidad con el ejercicio saludable.
Estrategicas para las fiestas de Navidad: Asegurarnos de tomar un aperitivo rápido antes de que empiece la fiesta, para no estar hambrientos - una fruta y una loncha de pechuga de pavo es un ejemplo de una opción sana. Decidir con antelación cuántas galletas o patatas vamos a tomar y ser muy extricto. Compensar el exceso de calorías a lo largo del resto del día; una crema de verduras o una ensalada en la otra comida o cena. Si es una fiesta en la que todos se llevan algo, preparar alimentos saludables compatibles con el tipo de dieta que estamos siguiendo. Tener especial cuidado con las calorías adicionales ocultas en las bebidas alcohólicas. Tomar vino blanco en lugar de tinto y mezclarlo con agua con gas para que dure más. O mezclar un vaso de vino espumoso con zumo de naranja.
Comidas o cenas de Navidad de empresa: Alrededor de esta época del año, la tradicional comida de Navidad con los compañeros de trabajo es otra posible amenaza para la dieta. Sea lo que sea el tipo de restaurante elegido, debemos intentar evitar las opciones de carta con salsas o fritos. Si es un menú concertado, siempre podemos pedir medias raciones. De nuevo es importante no pasarse con el vino, elegir un té verde desintoxicante en vez de café y, en lugar de una bebida alcohólica para la sobremesa pedir agua con gas.
Hacer ejercicio: En muchos lugares del mundo, el invierno ofrece unas oportunidades de ejercicio únicas que no se pueden practicar el resto del año. Desde el patinaje sobre hielo al esquí, hay oportunidades para quemar calorías. Además, se queman mas calorías cuando hace frio, así que el tiempo se convierte en nuestro aliado. Si no nieva donde vivimos, podemos simplemente salir a caminar a paso rápido durante al menos media hora después de cada comida. Es un buen modo de asociar los excesos de la Navidad con el ejercicio saludable.