Rayos X con nanotubos de carbon
Un equipo de científicos de la Universidad de North Carolina y Xintek ha inventado un nuevo aparato para hacer radiografías basado en nanotubos de carbón. El nuevo sistema emite un rayo de rayos x compuesto de múltiples rayos más pequeños mientras que se queda parado. Así, el aparato puede crear imágenes de objetos desde numerosos ángulos distintos sin ningun tipo de movimiento mecánico lo que representa una gran ventaja ya que supone un aumento en la velocidad de imagen, una reducción en el tamaño del aparato, y menos costes de mantenimiento.
Según los científicos, este nuevo avance en la aplicación de nanotecnología a aparatos de rayos x podría llevar al desarrollo de sistemas de imágenes de rayos X más pequeños y más rápidos para las máquinas de rayos X en aeropuertos y para los que se utilizan para lograr imágenes tomográficos en medicina, como por ejemplo las tomografías computarizadas.
Los científicos creen que esto supone un gran avance, ya que si los resultados siguen siendo positivos, con el uso de nanotubos de carbón se podrán fabricar escáners con una mayor capacidad cuya fabricación costará menos y que gastarán menos energía.
Este equipo demostró hace cinco años que se podría utilizar nanotubos de carbón como fuente de rayos X y recibió su primer patente en 2000. Antes de estos resultados, el diseño convencional de tubos de rayos X no había cambiado durante más de un siglo.
Tecnología de rayos X con nanotubos permite que el aparato pueda funcionar a temperatura ambiental sin requerir los 1.000 grados Celsius que son necesarios para que funcionen las fuentes convencionales. Otra ventaja sobre las máquinas tradicionales es que se puede utilizar esta tecnología para cámaras de rayos X de alta velocidad para captar imágenes claras de objetos que se mueven a gran velocidad.
Según los científicos, este nuevo avance en la aplicación de nanotecnología a aparatos de rayos x podría llevar al desarrollo de sistemas de imágenes de rayos X más pequeños y más rápidos para las máquinas de rayos X en aeropuertos y para los que se utilizan para lograr imágenes tomográficos en medicina, como por ejemplo las tomografías computarizadas.
Los científicos creen que esto supone un gran avance, ya que si los resultados siguen siendo positivos, con el uso de nanotubos de carbón se podrán fabricar escáners con una mayor capacidad cuya fabricación costará menos y que gastarán menos energía.
Este equipo demostró hace cinco años que se podría utilizar nanotubos de carbón como fuente de rayos X y recibió su primer patente en 2000. Antes de estos resultados, el diseño convencional de tubos de rayos X no había cambiado durante más de un siglo.
Tecnología de rayos X con nanotubos permite que el aparato pueda funcionar a temperatura ambiental sin requerir los 1.000 grados Celsius que son necesarios para que funcionen las fuentes convencionales. Otra ventaja sobre las máquinas tradicionales es que se puede utilizar esta tecnología para cámaras de rayos X de alta velocidad para captar imágenes claras de objetos que se mueven a gran velocidad.