Nanotecnología y Medicina en Europa
Ayer la European Science Foundation presentó un estudio pionero en Europa sobre las aplicaciones médicas de la nanotecnología.
Los objetivos del estudio son definir el estado de la cuestión de la nanomedicina en Europa, identificar los puntos fuertes y los puntos débiles y ofrecer recomendaciones sobre futuras tendencias de investigación, infraestructuras de organización e investigación, y métodos para difundir la información a los líderes políticos y el público en general.
El estudio se llevó a cabo mediante una serie de cinco talleres temáticos seguido por un "congreso de consenso" al que asistieron más de 70 representantes del mundo científico, la industria, fundaciones del sector privado y agencias de investigación gubernamentales.
En un resumen de las conclusiones de todo el proceso, los participantes ofrecen una definición del objetivo de la nanomedicina: "El control, la reparación y la mejora extensiva de todos los sistemas biológicos del ser humano, trabajando desde el nivel molecular y utilizando aparatos y nanoestructuras para aportar beneficios médicos". Esta definición contempla el uso de herramientas analíticas para comprender mejor la base molecular de una enfermedad, además del diseño de nuevos, sistemas para terapias y administración de medicamentos mucho más efectivos y realizados a través de la nanotecnología.
Según el estudio de la ESF, para realizar este objetivo, es necesario investigar los campos de ciencia de materiales y fabricación de aparatos, además de asuntos de seguridad y toxicidad relacionados con impactos sobre el medioambiente y procesos de producción. Estas investigaciones requieren un enfoque multidisciplinar además de un estudio cuidadoso de cuestiones clínicas, éticas y sociales.
Según los autores del estudio, Europa tiene especial fuerza en el campo del asemblaje físico y químico de nanoestructuras. Recomiendan que futuros esfuerzos deben centrarse en la orientación de tecnologías existentes hacia retos específicos de la nanomedicina y en el fomento
de mayores conocimientos en la producción, caracterización, capacidad de reproducir y control de calidad.
El informe es más crítico al tratar la organización y la financiación de la nanomedicina en Europa. Aun reconociendo un aumento significativo en fondos disponible para investigación en nanotecnología a nivel nacional y europeo, advierte sobre una excesiva fragmentación y propone una mayor coordinación de actividades relacionadas con la investigación, la creación de centros europeos de excelencia en nanomedicina y el desarrollo de mecanismos de financiación con mayor alcance y duración.
Concluye que para ganar y mantener una posición de liderazgo en nanomedicina es imprescindible que Europa mejore su sistema de transferencia de la tecnología y recorte el tiempo que se tarda en sacar resultados de los laboratorios al mercado.
Se puede leer las conclusiones del estudio aquí: http://www.esf.org/newsrelease/83/SPB23Nanomedicine.pdf
Los objetivos del estudio son definir el estado de la cuestión de la nanomedicina en Europa, identificar los puntos fuertes y los puntos débiles y ofrecer recomendaciones sobre futuras tendencias de investigación, infraestructuras de organización e investigación, y métodos para difundir la información a los líderes políticos y el público en general.
El estudio se llevó a cabo mediante una serie de cinco talleres temáticos seguido por un "congreso de consenso" al que asistieron más de 70 representantes del mundo científico, la industria, fundaciones del sector privado y agencias de investigación gubernamentales.
En un resumen de las conclusiones de todo el proceso, los participantes ofrecen una definición del objetivo de la nanomedicina: "El control, la reparación y la mejora extensiva de todos los sistemas biológicos del ser humano, trabajando desde el nivel molecular y utilizando aparatos y nanoestructuras para aportar beneficios médicos". Esta definición contempla el uso de herramientas analíticas para comprender mejor la base molecular de una enfermedad, además del diseño de nuevos, sistemas para terapias y administración de medicamentos mucho más efectivos y realizados a través de la nanotecnología.
Según el estudio de la ESF, para realizar este objetivo, es necesario investigar los campos de ciencia de materiales y fabricación de aparatos, además de asuntos de seguridad y toxicidad relacionados con impactos sobre el medioambiente y procesos de producción. Estas investigaciones requieren un enfoque multidisciplinar además de un estudio cuidadoso de cuestiones clínicas, éticas y sociales.
Según los autores del estudio, Europa tiene especial fuerza en el campo del asemblaje físico y químico de nanoestructuras. Recomiendan que futuros esfuerzos deben centrarse en la orientación de tecnologías existentes hacia retos específicos de la nanomedicina y en el fomento
de mayores conocimientos en la producción, caracterización, capacidad de reproducir y control de calidad.
El informe es más crítico al tratar la organización y la financiación de la nanomedicina en Europa. Aun reconociendo un aumento significativo en fondos disponible para investigación en nanotecnología a nivel nacional y europeo, advierte sobre una excesiva fragmentación y propone una mayor coordinación de actividades relacionadas con la investigación, la creación de centros europeos de excelencia en nanomedicina y el desarrollo de mecanismos de financiación con mayor alcance y duración.
Concluye que para ganar y mantener una posición de liderazgo en nanomedicina es imprescindible que Europa mejore su sistema de transferencia de la tecnología y recorte el tiempo que se tarda en sacar resultados de los laboratorios al mercado.
Se puede leer las conclusiones del estudio aquí: http://www.esf.org/newsrelease/83/SPB23Nanomedicine.pdf