Los Proms – dos conciertos para el piano
Echo de menos no ir a los conciertos Proms este año. Mi primera experiencia de los Proms fue en 1947 y he ido a uno o más conciertos todos los años desde entonces y algunos años he comprado un abono para toda la temporada. Pero este año he decidido no ir a ningún concierto pero gracias a la BBC he visto varios de los conciertos televisados y es casi tan bueno como estar allí. Creo que el programa este año es un poco raro con demasiado énfasis en los aniversarios pero supongo que es una cuestión de preferencia y gusto.
Acabo de ver una repetición de dos conciertos de la programa para esta semana - ambos eran obras para el piano y orquesta. Uno fue un concierto para el piano de Tchaikovsky representado por Stephen Hough (el Concierto Fantasía en G mayor) con David Robertson dirigiendo la orquesta sinfonía de la BBC. Generalmente esta considerado como una obra muy especial – fue nuevo para mi y disfrute mucho viéndola en la tele – hubo muchos aplausos entusiastas del publico al final. Hough parece ser un favorito con el público de los proms y dio una buena representación de la obra.
El otro concierto fue el pianista Chino Lang Lang representando el concierto para el piano de No.2 en F menor. Después leí una critica del concierto poco entusiasta, el critico implico que el pianista ‘jugo’ con la música. Por supuesto Lang Lang es bastante teátrico en sus representaciones - parece estar enamorado con la música pero también consigue tocar sin ningun fallo y con una delicadez exquisita. El publico se volvió loco al final del concierto y el bis fue casi una formalidad – no hubo duda. Es un pianista asombrante y todavía un artista muy joven y en esta ocasión tenía la ventaja de estar acompañado por la orquesta Staatskapelle Dresden, dirigido por Fabio Luisi.
Me pregunto que es que les hace tocar tan bien – no miren el teclado y tocan con una confianza total. En particular Lang Lang parece estar en contacto con poderes más allá. Intentar aprender tocar el piano era uno de las cosas que no conseguí cuando era mas joven (¡aprender Español es otra!). Solo conseguí aprender suficientemente para tocar una sonata de Beethoven pero no muy bien y eso después de mucho tiempo y esfuerzo.
No obstante existen artistas internacionales asombrosos que parecen pertenecer a otro especie de ser humano y quienes aportan tanto encanto a los amantes de la música.
B.R.
Acabo de ver una repetición de dos conciertos de la programa para esta semana - ambos eran obras para el piano y orquesta. Uno fue un concierto para el piano de Tchaikovsky representado por Stephen Hough (el Concierto Fantasía en G mayor) con David Robertson dirigiendo la orquesta sinfonía de la BBC. Generalmente esta considerado como una obra muy especial – fue nuevo para mi y disfrute mucho viéndola en la tele – hubo muchos aplausos entusiastas del publico al final. Hough parece ser un favorito con el público de los proms y dio una buena representación de la obra.
El otro concierto fue el pianista Chino Lang Lang representando el concierto para el piano de No.2 en F menor. Después leí una critica del concierto poco entusiasta, el critico implico que el pianista ‘jugo’ con la música. Por supuesto Lang Lang es bastante teátrico en sus representaciones - parece estar enamorado con la música pero también consigue tocar sin ningun fallo y con una delicadez exquisita. El publico se volvió loco al final del concierto y el bis fue casi una formalidad – no hubo duda. Es un pianista asombrante y todavía un artista muy joven y en esta ocasión tenía la ventaja de estar acompañado por la orquesta Staatskapelle Dresden, dirigido por Fabio Luisi.
Me pregunto que es que les hace tocar tan bien – no miren el teclado y tocan con una confianza total. En particular Lang Lang parece estar en contacto con poderes más allá. Intentar aprender tocar el piano era uno de las cosas que no conseguí cuando era mas joven (¡aprender Español es otra!). Solo conseguí aprender suficientemente para tocar una sonata de Beethoven pero no muy bien y eso después de mucho tiempo y esfuerzo.
No obstante existen artistas internacionales asombrosos que parecen pertenecer a otro especie de ser humano y quienes aportan tanto encanto a los amantes de la música.
B.R.